Vivimos en una cultura donde si algo nos gusta o no nos gusta, posteamos o hablamos sobre ello con todos los que están a nuestro alrededor. Y lo hacemos desde la comodidad de nuestros celulares, en nuestras redes sociales, a través de reseñas, memes, videos o post.
Así como podemos hablar sobre ese libro que tanto nos gustó, o esa serie que ya vimos 3 veces, la película nueva que salió o la canción de nuestra banda favorita, por ejemplo. Tenemos tantas cosas de las que hablar, que podemos olvidar que Cristo y el Evangelio son una parte importantísima de nuestra vida… de hecho, la más importante, aquella que es vital.
Cuando era adolescente, mi mamá siempre me decía antes de ir a la escuela: “Sé de testimonio, que tus palabras y acciones sean consecuencia de tu vida en Cristo”. Te puedo decir que muchas veces mi rebeldía salía a relucir más que mi amor. Gracias a Dios, esas veces eran pocas en comparación a los días en los que podía ser de testimonio.
Con el uso de las redes sociales y esta etapa global que vivimos en cuarentena, es mucho más fácil poder compartir de Cristo. Talvez no sepas qué decir o cómo decirlo. Tengo una noticia para ti: ADG Jóvenes tiene devocionales diarios, imágenes y videos para que puedas simplemente reenviarlos a tus amigas, familiares o vecinas.
“… No os preocupéis por lo que habéis de decir, ni lo penséis,
sino lo que os fuere dado en aquella hora, eso hablad;
porque no sois vosotros los que habláis,
sino el Espíritu Santo.”
Marcos 13:11
Las redes sociales son poderosas y prevalecen en nuestra cultura en estos días. Pueden ser despiadadas y crueles a veces. El más pequeño de los granos de arena puede convertirse en una montaña y lo aparentemente mundano puede volverse viral. Ya sea que el tema del día sea la comida, las películas o la política, parece que todos tienen una opinión y, además ¡muy fuerte!
Sin embargo, los creyentes en Cristo debemos tener cuidado, no solo de lo que compartimos, sino de cómo lo hacemos. El tono importa y los testimonios importan aún más. Esta verdad es la esencia de 1 Timoteo 4: 11-13. De hecho, Pablo dio una guía que todos los creyentes deben seguir en 1 Timoteo 4:12
"Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza."
Esta no es solo una enseñanza para un líder joven en la iglesia, sino para todos los creyentes jóvenes. El ejemplo que damos ayuda a los demás. Y aunque nuestro testimonio se pone a prueba en la era de las redes sociales, hay un principio subyacente importante que debemos seguir en todo lo que hacemos: debemos vigilar nuestro discurso, nuestro caminar, nuestras obras, nuestra fidelidad y nuestra santidad. Todos estos principios son importantes para las personas y lo que es más importante para Dios.
Cómo podemos dar un testimonio en medios digitales:
- Crea o comparte en WhatsApp los artículos, devocionales, imágenes de versículos que ADG Jóvenes tiene disponibles.
- Dale me gusta o comparte en Instagram tu estudio devocional personal (guía de estudio).
- Repostea videos de tus alabanzas favoritas, mándalas al grupo de estudio. Spotify tiene muchas bandas y playlists con música cristiana.
- Hagas lo que hagas, sé un ejemplo de la Verdad.
La visión de Ama a Dios Grandemente Jóvenes es tener un mayor alcance a las jóvenes de habla hispana, para que formen un hábito devocional diario en el estudio de la Biblia. Así mismo, la misión por la que nos guiamos es ayudar a las jóvenes a Amar a Dios grandemente con sus vidas, como una comunidad creciendo y animándolas. Oramos por ustedes.
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